El amor es un trabajo

El amor es un trabajo duro, muy duro diría yo; requiere dedicación, esfuerzo, paciencia, constancia y sacrificio. Todo al mismo tiempo. Es la jornada completa que no acaba nunca y que rodea todos tus entornos desde tu pareja, tu mascota, tu familia, tus amigos o al vecino del tercero. Está ahí desde que te levantas hasta que te acuestas.

Pero entendamos bien qué es un trabajo, porque no me refiero al típico sistema de ocho horas automatizado al más puro estilo taylorista con sus respectivas cadenas de montajes sino al trabajo que te apasiona, que te quita el sueño, que te hace caerte y levantarte al mismo tiempo, ese trabajo del que sabes que nunca te querrás jubilar, ese trabajo que sabes que aunque llegase la competencia y te ofreciese el doble tú… no lo aceptarías jamás.

¿Por qué? Porque te gusta lo que haces, porque te LLENA lo que tienes. Porque, sin más, quieres pasarte la vida haciendo de tu rutina un caos y de tu caos una rutina.

san valentin

Querido amor, te quiero porque eres, cada día, mi mayor reto y mi mejor proyecto.